PsicoMundo Argentina - Canal informativo
Vecindades entre Literatura y Psicoanálisis

Lo inconsciente y la literatura del Rio de la Plata I
15/06/2001

Juan Diaz

Para algunos pensadores contemporáneos, el psicoanálisis es la razón moderna dialogando con sus sombras, con esas sombras que la exceden...El exceso de sentido y lo incomprensible de algunas experiencias humanas tanto en lo particular como en lo colectivo son formas de manifestarse, de revelación de lo inconsciente.

Es en la insistencia de esas experiencias sensibles, en las que percibimos con clara intensidad cierta fragmentación entre sentido y significado.

Dar significado a ese vacío casi imposible de suturar constituyen la esencial vecindad entre literatura y psicoanálisis.

Con esta frase comienza nuestra literatura: "Sombra terrible de Facundo voy a evocarte para que, sacudiendo el ensangrentado polvo que cubre tus cenizas; te levantes a explicarnos la vida secreta y las convulsiones internas que desgarran las entrañas de un noble pueblo"!.

Esta frase es inicio, y fundación de nuestra literatura. La novela ya histórica, ya política o a modo de ensayo, también un modo de relato, un estilo y un paradigma

Relato y estilo son modos de alojarse en el mundo, de testimoniar, formas de escribir subjetividades, de encarnarlas. Resonancias del cuerpo que no nos son ajenas.

La invitación es en este sentido abierta al recorrido que abre nuestra literatura , que genera un modo de escribir y de leer, un modo de relatar y de escuchar nuestro modo particular de transitar .

En la actual coyuntura signada por cierta declinación de los grandes relatos, y de eclipsamiento de la tragedia, no es , creo , ocioso volver a los inicios de nuestra lengua.

De alguna manera, hoy , el relato colectivo nos muestra hombres que al modo de Hamlet, hacen lo que deben hacer pero no lo que tienen que hacer, así como también treinta mil antígonas que no cesan en su demanda. Quizá de este entrecruzamiento pueda resituarse el espacio clínico en su sentido ético más profundo.

Espacio clínico entre lo colectivo y lo particular donde las ficciones colectivas se encarnizan, se alucinan, en fin un espacio donde saberes y verdades se ponen a prueba y también se destituyen y subvierten.

La puesta en acto de esa práctica en ese espacio recorta una figura ética que no es para nada ajena a la coyuntura histórica en la que transcurre. A veces el efecto simbólico de ciertas operaciones de discurso hace que confundamos la atemporalidad con la ahistoricidad. La sensación de lo inevitable del actual discurso hegemónico de poder, del fin de la historia y otras opacas construcciones adormecedoras van en esa dirección. La noción de sujeto sujetado, la de síntoma y la no menos importante, la de saber hacer con ..."eso", que no permite adormecerse, que antes bien sacude ,despierta y estremece van en un sentido contrario, si todo esta escrito y concluido, este espacio habla de que algo no cesa de no inscribirse y que todo esta por hacerse. Para los antiguos griegos el pensamiento era, sobre todo cuidado de sí. Pensar y curarse era lo mismo. Esta era la acepción puntual de la clínica.

Como vemos las palabras cambian , no son gemas, son más bien cantos rodados en el lecho de la temporalidad, nos dan idea de eternidad, pero también ésta como las piedras se redondean en formas perfectas y completas junto a otras y luego se extinguen arenosamente.

Positivismo y psiquiatría fueron el entrecruzamiento necesario de dos prácticas de borde pero no de discurso necesariamente. Si el positivismo fue un discurso totalizador con una operatoria racional, que leía " en la naturaleza de las cosas", la psiquiatría aún hoy esta lejos de autorizarse en algo que podamos llamar discurso en sentido estricto. De esta coincidencia plena de sentido surge esta reducción de la clínica a la sicopatología. De la sombras de la razón positiva surgían otras sombras, la de aquellos que dialogaban en la estética penumbrosa del hospital intramuros , quienes de ahí en más serían los "internos".

El diálogo de la razón con sus sombras es y sigue siendo el motivo esencial de nuestra literatura . Bordear ese vacío es lo que siempre inspiró a nuestros escritores. El uso del término inspiró no es accidental, es antes bien el más exacto, es el que algunos pensadores han denominado la "seducción de la barbarie".

La barbarie, lo no civilizado era pensado por Sarmiento como aquella "incapacidad de desenvolver el pensamiento por no conocer el sentido de las palabras". El autor del Facundo va a detectar allí una quebradura en el "pienso luego existo" por un "soy donde no pienso" que se le revela con una fuerza arrolladora, fuerza que él no puede descifrar ni dar sentido... y algo más que esa fuerza también lo constituye y lo fascina. Esta tensión estará presente en toda la obra de Sarmiento.

Nuestra lengua, ya sea por su resonancia, ya por su temática, siempre ha sido una lengua de extranjería fronteriza respecto de la que le dio origen, la castellana. El Facundo y El Martín Fierro, con "f" y no con "h", son contundentes al respecto.

El redoble sonoro de la f por la h y el de la y por la ll, hace al acento de nuestra lengua , lo que la constituye y le da identidad. Esta cuestión nos lleva preguntarnos ¿ de dónde viene la percepción de que el lenguaje no es sonido, y es sentido? ¿ Cómo sabe la prematura criatura humana, los niños, que lo que se le dice son palabras y no sonidos? Lo único que podemos constatar es que la sensibilidad al sentido se encuentra en el nacimiento mismo del sujeto.

Ese sujeto bárbaro del Facundo "incapaz de desenvolver el pensamiento por no conocer el sentido de las palabras" advendrá con todo su potencial en "El gaucho Martín Fierro", para hacerlo Hernández tendrá que " inventar" una forma de escritura y al decir de Borges un género literario particular , el de la novela escrita en verso, el personaje , el sujeto entramado de esta narrativa tendrá una ética particular una singularidad: " La que presume que la sangre vertida no es demasiado memorable, y que a los hombres les ocurre matar" descífrese "matar al hombre que tiene que matar todo hombre".Etica que desafiará el sentido de la literatura romántica de la época . El cifrado de estas frases presupone cierto eclipsamiento de sentido, el efecto es la evanescencia del combate heroico propio de héroe.

De este modo de transcurrir ,de esta subjetividad, dirá Borges..."Expresar hombres que la futuras generaciones no querrán olvidar es uno de los fines del arte, José Hernández lo ha logrado con plenitud". Subjetividad que da testimonio en su biendecir pero de extraña y sombría originalidad en relación a la razón moderna.

De extranjería fronteriza también es esencialmente el síntoma, ese inquilino inquietante del que "uno nada sabe", y otros se empeñan en ocultar cuando no en maldecir.

Varios son los "hechos malditos" que han inspirado a nuestros autores. El 4 de julio de 1943, en el diario La Nación, va a aparecer publicado un poema que es concebido durante el espacio de tiempo de 30 días del golpe militar pro fascista del General Farrel ...El Poema Conjetural de Borges, obra clave de su obra y por lo tanto de nuestra literatura. El poema es contemporáneo a lo que comenzaba a surgir en nuestro país...lo que algunos clasificaron de "aluvión zoológico" y otros nominaron"el peronismo". Entre medio Borges escribió este poema, inspirado en el asesinato de Francisco Laprida por las montoneras de Aldao.

En ese poema Borges hurga en la lengua y sitúa... "la letra que faltaba, la perfecta forma que supo Dios desde el principio...", para aquel que anhelaba ser otro. Forma fascinante de enunciar que algunas veces sucede que el bien y la verdad no están en ninguna parte y solo la persistencia trágica del mal y el error son inalterables. La conjetura del poema se derramará sobre el futuro inmediato y llegará hasta nuestros días , quizá como una forma de hacer comprensible una totalidad destotalizada, una totalidad que es no toda.

Literatura de fronteriza extranjería, compuesta de partes de relatos, que quieren ser novela colectiva, de borde , de orilla ,de orilleros, de exiliados, de desterrados. Literatura de desgarro.

A Borges le gustaba decir que..."no en vano el arte es ante todo , una forma de ensueño".

Quizá también aún hoy insistan tanto en lo particular como en lo colectivo los sueños del sujeto que engendró la escritura del Martín Fierro y El Facundo, y que inspiraron el "Poema Conjetural" .

Quizá no nos demos cuenta que esto también nos atraviesa y nos constituye.

Entre medio decía de la clasificación, "aluvión zoológico y de la nominación, "peronismo", Borges escribió poesía, una forma de desanudar un sentido y una significación fijas, coagu ladas, intentó crear una significancia vacía que diera otro sentido al desgarro en el origen. He aquí nuevamente cierta forma de nombrar esta borrosa vecindad entre literatura y psicoanálisis ...la que existe entre poesía e interpretación.

Espacio de preguntas sobre el texto.

Norma Ferrari - ¿ Vos hablas de cierto efecto de confusión que se produce entre la noción de atemporalidad y la de ahistoricidad: podrías ampliarlo un poco más?-

Juan Díaz – La idea de atemporalidad estaría vinculada a lo constante de una estructura, a las operaciones de discurso sintácticas , gramaticales y por lo tanto la noción de sujeto que esas operaciones soportan. Lo histórico estaría dado por el sesgo particular que toma ese discurso en un momento dado , por el contexto en que surge , los entrecruzamientos con otros discursos , los intereses que esas " ideas " representan y fundamentalmente la encarnadura, los modos subjetivos que se gestan y le dan vida a esos discursos , la íntima nervadura que se palpita en una época y la hace clara y distinta de otras . Si cabe la expresión , un modo de respirar que genera la cadencia de una lengua , una metonimia , una resonancia.

Es lo que en la clínica serían las operaciones lógicas , las formaciones, los mecanismos del Inconsciente ,y otra cuestión son los modos en que estas se dan a conocer , estoy hablando de la lógica del caso por caso , de esa forma "sui generis" en que esta estructura se nos revela

En términos prácticos podríamos concluir que la teoría que supone un sujeto sujetado no es constatable sin la encarnadura de la subjetividad. Si bien la naturaleza de la estructura que la hace inteligible es de otro tiempo – tiempo lógico – el modo de revelación siempre es histórico en su forma de darse a conocer.

Aprovechando esta vecindad entre Literatura y Psicoanálisis , puedo decir que un escritor es alguien que encuentra las formas narrativas y poéticas contemporáneas para los dramas y los temas de siempre , pero sin olvidar que del mismo modo que nunca se escribe de la misma manera, tampoco se lee de la misma forma....

Volviendo a la pregunta, la idea de atemporalidad como sinónimo de inmovilidad, de concluido, de fin de la historia, de una sola economía y una política posibles van en una dirección, mientras que la idea de sujeto sujetado , de síntoma, de que algo no cesa de no inscribirse y que algo hay que saber hacer con eso que no se deja sujetar, en otra. Este anudamiento, entre lo simbólico y lo imaginario – confusión – no es más que lo que en otros registros se designa como ideología , ideología dominante para ser más precisos.

Pregunta del público - Usted decía que algo del poema conjetural aún llega hasta nuestros días. ¿ Podría explicarlo un poco más ? –

Juan Díaz – Tanto en la interpretación de Borges del Martín Fierro , como en su Poema Conjetural puede percibirse la idea que presume que la sangre vertida no es demasiado memorable y que a los hombres les ocurre matar...a Borges le gustaba decir que los actos, muchas veces calumnian a los hombres.

Este modo – del morir y del matar -ambiguo , capturado como sinsentido, como abierto y concluido a la significación , como suceder, es un rasgo particular de este momento fundacional de nuestra literatura y marca hasta nuestros días nuestra lengua.

No se trata de una epopeya , que requiere de cierta perfección en los caracteres de los personajes que la animan, tanto Fierro como el Narciso Laprida que describe Borges en el Poema Conjetural son creíbles por sus imperfecciones.

Borges decía que Hernández, Shakespeare, son ambiguos en los personajes que dan vida a sus relatos, pero que Dios es infinitamente más ambiguo.

Este modo de transcurrir, del suceder del hecho va a generar un modo una encarnadura del vivir, del morir, y del amar.

La muerte impensada en la noche lateral de los pantanos, de aquel que anheló ser otro, de quien declarara la independencia, que tiene el íntimo cuchillo en la garganta, y que le endiosa el pecho un júbilo inexplicable y secreto , por fin se encuentra con su destino latinoamericano , la perfecta forma que supo Dios desde un principio.

Este modo de alojarse en el mundo, viene a recordar que muchas veces el bien no esta en ningún lugar y solo la persistencia trágica del mal esta en todas partes.

La historia a veces se repite como tragedia y otras como comedia ; quizá por esta operación discursiva nuestra historia siempre se repite como tragedia , sin olvidar que cuando hay insistencia de la tragedia y esta no cierra un sentido ético por llamarlo de alguna manera, este espacio es completado por el sentido estético del horror y entonces sólo queda lo patético.

El acuñamiento del término desaparecido – es una conjetura - sería un efecto de esta operación discursiva , que curiosamente los españoles han dado en llamar " la muerte Argentina ".

Este término, ni vivo ni muerto, inciertamente eficaz, inciertamente ambiguo, también es originario de esta época de inicio de nuestra literatura, y se refiere a los desaparecidos de la "Mazorca". Si había desaparecidos, habría luego leyendas de aparecidos.

Se decía que ni Juan Lavalle había sido inmune a esta cuestión y que en cierta ocasión no se habría animado a entrar en Buenos Aires porque el fantasma de Manuel Dorrego antiguo compañero de armas – "su fusilado" – se le aparecía en tortuosas visiones.

Quiero poner énfasis en esta cuestión, no me refiero solamente a la cuestión simbólica de la nominación ex – nihilo, que por quedar anotada en ése registro va más allá del cuerpo que la soporta , sino a la sutil diferencia entre lo "no memorable " y " lo imposible de olvidar " que continúa hasta nuestros días con la actualización de nuestros desaparecidos. Esta operatoria va a generar cierto plus de encarnizamiento con los cuerpos...Para los que se interesen en la temática recordaré solamente las vicisitudes de un cuerpo, el de Evita, y recordaré que en medio de un período y otro de desapariciones un tal Rodolfo Walsh escribió un cuento – "Esa Mujer" - ... y que tampoco es ocioso recordar el destino de Walsh.....

Silvia Cislaghi – Se me ocurre que de este desarrollo podría pensarse que de algún modo habría cierto acortamiento en los modos de producción del síntoma ...te animas a hablar sobre este punto?

Juan Díaz – Más que hablar, intentaré una aproximación y, aclaro, más que aproximación será una precipitación

Por un lado es una pregunta para analistas y para los que no son analistas precisaré que Silvia se refiere a los tres momentos del síntoma descriptos por Freud , a saber : hecho traumático , resignificación y retorno de lo reprimido . En esa dirección podría pensarse en una clínica de las neurosis actuales , a lo que de algún modo me resisto , la clínica no hace Literatura y viceversa , esto sería una simplificación ; sin embargo abren líneas de exploración tanto teóricas como prácticas que de algún modo redundan en cierta "afinación de la escucha", en cierta precisión en la diferencia entre el bla, bla y el bien decir, hacen en cierto modo a la poética de la interpretación , a esa operación capital del acto analítico.....

Los personajes de la narrativa de los grandes relatos siempre han sido convocados en la producción teórica del Psicoanálisis como apólogos , Edipo , Antígona , Hamblet como modelos privilegiados para capturar lo esencial de la estructura , lo que hace pregunta , lo que insiste , el enigma ...Lacan pensaba que en estos momentos hay dos tipos de Literatura , la del fantasma y la del síntoma . La primera plena de sentido , de un único sentido , los Best Sellers estarían en esa dirección , desde el inicio el lector sabe el final...la del síntoma es otra cuestión , abierta a todo tipo de interpretación y de incierto y ambiguo final .Nuestro Roberto Arlt es significativo al respecto, " Los Siete Locos " me relevan de toda demostración.

Vuelvo al inicio , nuestros narradores , Sarmiento , Echeverría, Hernández , y un poco más cerca Walsh , Paco Urondo , describen , cuando no padecen , ciertas experiencias constitutivas de nuestra lengua – verdaderas desmesuras de la Historia - experiencias donde se percibe con claridad cierta fragmentación entre sentido y significado , cierto modo de tránsito subjetivo que hace a los modos de revelación de la estructura del Inconsciente , esta vecindad , creo todavía no ha sido del todo explorada...la considero pendiente...otra forma , no en este trabajo, de abordar la cuestión sería una investigación , sobre las instituciones del psicoanálisis en relación a esta temática.

PsicoMundo - La red psi en Internet